Nuestro estado de Nuevo León se destaca por ser líder a nivel nacional en venta de vivienda nueva y uno de los primeros lugares en nuestro país en la compra de vivienda usada.

El sueño de muchos regiomontanos es tener vivienda propia, sin embargo, una cosa es querer y otra cosa es poder. Como referencia, en los Estados Unidos, de acuerdo con la NAR (National Association of Realtors) que se distingue por tener muy buenos estudios y estadísticas de los compradores de vivienda, el 35 por ciento son Millennials, el 26 por ciento son de la Generación X, un 31 por ciento de los Baby Boomers y 9 por ciento de la Generación Silenciosa.

De acuerdo con las estadísticas de la Red de Franquicias de REALTY WORLD México, en nuestro estado son más o menos similares.

A continuación, les daré algunas recomendaciones para que logren echar raíces y adquirir su vivienda optimizando su tiempo y su presupuesto. Lo primero es analizar tus necesidades de espacio en habitaciones, baños, cocina, etcétera, así como la cercanía al trabajo, escuelas y familia.

Lo segundo que debes de analizar son tus ahorros, ya que los vas a requerir para el enganche y otros gastos. Para evitar, un largo peregrinar en las instituciones financieras donde seguramente te buscarán convencer que su crédito es el de la mejor tasa, es mejor buscar un Asesor Inmobiliario Certificado que tenga una amplia cartera de casas y departamentos, tanto nuevas como usadas.

Además, que maneje todas las opciones de crédito de Bancos, Sofoles, de organismos públicos como el Infonavit y el Fovissste y que pueda guiarte a las mejores opciones financieras.

Los plazos para los créditos hipotecarios son de suma importancia, se considera que el plazo ideal es de 15 años, por lo que mientras los plazos sean más largos como de 20, 25 y 30 años son los menos convenientes.

Debemos ponerle mucha atención a que cada mensualidad se abone lo máximo posible al capital.

Es importante conocer las condiciones de las construcciones de las casas o departamentos nuevos, debemos preguntar por la calidad de los materiales y equipos que nos ofrecen, así como sus respectivas garantías que ofrece el desarrollador.

En las viviendas usadas, preguntar por los materiales que se utilizaron y sugerimos apoyarse con algún arquitecto que ayude a inspeccionar la calidad materiales constructivos, así como la vida remanente de instalaciones eléctricas y sanitarias.

Otro aspecto importante es conocer los antecedentes legales de la propiedad, por lo que sugerimos a través de su notario de confianza verificar en el Registro Público de la Propiedad la libertad de gravámenes y que no se encuentre con anotaciones marginales o litigios.

Por último, preguntar por los servicios, cuáles están contratados y cuáles deberás gestionar. En caso de las viviendas usadas, habrá que solicitar el último recibo pagado de luz, agua y gas. La omisión de los pagos mencionados deberá cubrirlos el nuevo propietario. Les recomendamos tomar lecturas el día de la firma de las escritura para que el vendedor le pague a usted lo que le corresponda.

El autor es experto del sector inmobiliario en México. Es presidente de la firma de bienes raíces, líder en el país, REALTY WORLD México, y presidió la Federación Internacional de Profesiones Inmobiliarias (FIABCI) en 2014, 2015 y 2016.Capítulo México. jorge@realtyworld.com.mx